La peligrosa lengua de Gene Simmons, que no sólo le sirve
para desenrollarla en los conciertos, se fue en contra de Kurt Cobain y Amy
Winehouse.
En una entrevista para Team Rock Radio, el bajista de Kiss declaró
que no hay que considerar al parcito mencionado como íconos musicales,
sólo porque hayan muerto. “Kurt Cobain, no; tiene uno o dos discos, eso no es
suficiente. Amy Winehouse, tiene uno o dos discos, eso no es suficiente. ¿Que
hayas muerto te convierte en un icono? No, no”.
Con todo el respeto que me merece el señor lengua larga,
Kurt Cobain y su banda Nirvana tienen más de dos discos. Además, antes de morir
ya era reconocido por su música, letras
y carisma.
La desgarrada voz Kurt representó el grito de desesperación
y desencanto con el mundo de muchos jóvenes que en Chile, por ejemplo, venían
saliendo de un gobierno autoritario, de un periodo de Guerra Fría, en el caso
de EE.UU. y Rusia y de la caída de un muro que dividió a Alemania por tantos años.
Además, la música de Kurt ya ha trascendido a nuevas
generaciones. Hoy, los cabros chicos de 15 años conocen la música de Nirvana.
En cambio a usted lo conocen por su reality y porque dijo que se había acostado
con cerca de cinco mil mujeres. Dudo mucho que alguien de este rango de edad me
pueda mencionar tres canciones de Kiss.
Ahora, insisto. No desconozco su talento señor Simmons y por
algo fui a ver su show en Chile en 2012, con el cual me embobé. Pero no se meta
con Kurt. Entiendo que para muchos fue sólo una cara bonita que le puso música
al resentimiento.
Pero no es así. Le repito que Kurt fue más que un cantante y
guitarrista. Fue (y pese a su muerte aún lo es) el representante de quienes
creemos que el éxito va más allá de lo material. Que la honestidad está por
sobre todo y que (parafraseando) es mejor ser odiado por quienes somos que
amado por quienes no somos.
Por último, como Kurt decía:
Paz, Amor y Empatía. (En este
caso para usted, mi respetado Simmons).
